La administración de los Estados Unidos no estaba muy interesada en el tema del Sahara, dejándolo en manos de las Naciones Unidas y controlando la diplomacia para manejar el conflicto, pero recientemente comenzó a sentir su distancia del tema, al cual no prestó atención, como lo hizo con muchos conflictos en el mundo que lo iniciaron. Y su apoyo a la independencia de Kosovo y la secesión del sur de Sudán. Sin embargo, tras la ola de la Primavera Árabe y las revoluciones populares y los efectos de la crisis del Sahel en África, hubo una necesidad de hacer algo al respecto del Sahara Occidental y poner fin al incumplimiento de Marruecos. Legitimidad internacional y rendición de cuentas. Puso urgente con la administración de Obama, como consecuencia de la existencia de los elementos de apoyo y apoya el derecho del pueblo saharaui a la libre determinación, y este camino continúa con la administración para Trump en presencia de John Bolton, manifestaciones Vmahe de esta presión? ¿Y continúa hasta que se resuelva el conflicto? ¿O es una presión para el interés propio, que generalmente está cubierta por la defensa de los derechos humanos, la democracia y otros principios?
Obama y la publicación de la tarjeta de derechos humanos ante Marruecos.
Con la llegada de Obama como presidente de Estados Unidos, la cordialidad de la amistad y la disolución de la intimidad de las relaciones entre Estados Unidos y Marruecos se ha erosionado, y nuevos estándares y herramientas de evaluación han comenzado a mostrar la seriedad de su aliado tradicional en la implementación de estándares internacionales de respeto por los derechos humanos y las libertades fundamentales en el Sáhara Occidental.
Marruecos no aceptó la seriedad de las posiciones presentadas por el decisor estadounidense, que se recibieron de manera incorrecta y superficial, ya que las declaraciones y los intentos de presionar no se convertirán en posiciones serias, y las acciones se presentan en foros internacionales como convicciones firmes, pero Marruecos continuó Estados Unidos ofreció un proyecto para expandir los poderes de la MINURSO para incluir el monitoreo de los derechos humanos. Luego Marruecos se tragó la lengua, suspiró aliviado y quedó sorprendido por la propuesta estadounidense, y luego la describió como radical y parcial. Se sorprendió por el lenguaje de la declaración final después de la visita del Rey de Marruecos a América. Respeto por los derechos humanos en el Sáhara Occidental y el empoderamiento de su gente. Para beneficiarse de su riqueza, y no para unirse al acuerdo de libre comercio con Marruecos.
Estos mensajes enviados por Estados Unidos a Marruecos indican una ruptura en las relaciones y un cambio en el tratamiento de los asuntos pendientes entre las partes, lo que confirma que las apuestas a las posiciones de los Estados Unidos en apoyo a la ocupación continuada del Sahara Occidental por parte de Marruecos y la cuestión del reconocimiento de la soberanía a través de la política cumplida. No es posible
Trump ... el final de su mandato y no hablar con Marruecos.
Algunos pueden pensar que el abandono de Trump de Marruecos se debe a su apoyo al rival Hillary Clinton, pero de hecho, ha transformado la naturaleza de la relación y un enfoque claro y explícito basado en una evaluación objetiva de las relaciones que Estados Unidos debería abordar con los aliados tradicionales. La visión de Trump debe basarse en el pragmatismo, el pago del proyecto de ley de protección y el paraguas de seguridad ofrecido por Estados Unidos a sus aliados. Esta política solo puede mostrarse con el presidente de Crambatt, quien no está preocupado por las posiciones de los adversarios y no está convencido por la obediencia de los aliados. La relación física con los demás y el abandono de la política de Y aquellos que siguieron las declaraciones de Trump durante su campaña electoral para Marruecos como estado o "nación terrorista" son conscientes de que no se lo ve favorablemente y de que no hablar positivamente sobre él después de su elección. Nombra un embajador por un año, lo que sugiere una falta de armonía y una crisis silenciosa entre ellos.
La resolución del conflicto del Sahara está en el corazón de la estrategia de Estados Unidos hacia África.
El asesor de seguridad nacional de los Estados Unidos, John Bolton, describió la nueva estrategia de Estados Unidos para África y la identificó en áreas relacionadas con la naturaleza de la nueva asociación afroamericana, particularmente las relaciones económicas, la invasión de la creciente marea ruso-china en África, la lucha contra el extremismo, la resolución de disputas y el gasto de impuestos. El pueblo estadounidense en las misiones de pacificación de manera efectiva y efectiva, este último se convirtió principalmente en las fuerzas de los espectadores de brújula, incluidas las fuerzas del Minorso, que describió en su libro: "Estados Unidos, rendirse no es nuestra elección", ya que se ha convertido en una carga para el proceso político y es inútil. Las intenciones de las partes no serán claras. "Queremos hacer un referéndum sobre 70,000 votantes (...) Después de 27 años, el estado de la región sigue sin resolverse ... Conozco al pueblo saharaui ... Les tengo mucho respeto". ¿No hay una manera de resolver esto?).
Los comentarios del asesor de seguridad nacional de los EE. UU. No han sido indiscriminados ni arbitrarios, sino nuevos caminos y tendencias en la política exterior de los EE. UU., Que se ven reforzados día a día por las críticas y el hostigamiento de la obstrucción de Marruecos a los esfuerzos internacionales para resolver el conflicto del Sahara. No permitiremos esta obstrucción imprudente y deliberada, y los impuestos de los estadounidenses nunca deben ser manipulados por Estados Unidos para apoyar a las fuerzas Minorsu en el Sáhara Occidental, y es hora de ver resultados tangibles y avanzar en la resolución del conflicto.
Lo que Bolton ha dicho sobre el tema del Sahara es una revisión cuidadosa del saldo contable y una fuerte bofetada para aquellos que apuestan por la sostenibilidad de la alianza y la estrategia de relaciones entre Marruecos y Estados Unidos. Estas señales desaparecen y desaparecen, y el momento de la evaluación y la rendición de cuentas ha llegado a su fin. La política de cortesía seca es inútil.
Al final, el poder de la propuesta y su intensidad y la continuación de la presión estadounidense, no refleja una posición repentina y el resultado del momento y no terminará sin obtener resultados, ya sea para estar a su favor, nada, obligándolos a mantener esas herramientas para chantajear nuevamente, o una estrategia integral y tratamientos para los problemas. Ha permanecido sin resolver, agotando el dinero de los EE. UU. Y dañando su reputación moral como defensor de la democracia. Al final, nos enfrentamos a una estrategia múltiple que ha evaluado los desequilibrios de las políticas.
